viernes, 23 de diciembre de 2011

El amor tiene un soundtrack, cuya canción no recuerdo...

Se escribió escuchando una salsa…

El amor instantáneo, tomado desde una esquina,
Con diferentes protagonistas y personajes,

El amor de vecindario, de colegio y universitario,
El amor sin ganas,
Sin dolor y con romance,

El amor anticuado, de una noche,
Y de varias más,

El amor que no ama,
La ciudad amada, lejana y agridulce,

El amor que no entiende, pero siente,

Esta canción se hizo recordando un poema…
Al final no existe…

No existe,Solo cuando miro tus ojos…

Soledad

Guarda silencio y escucha un segundo,
Observa,
Disfruta…
No todo siempre tiene que tener un porqué,

(aunque siempre me guste escuchar tus explicaciones)

Escucha…
Disfruta,
Acaricia…
Los momentos han mostrado la desilusión de un alma baldía,
Ayer el camino se mostró frío,
Esto sumado a sus colores,
La gente, los gestos,

Hoy renuncio al conocimiento, prefiero no saber lo que va en contra de este sentimiento…

Buenas noches Buenos Aires,
Hoy soy una mente desnuda en tus calles,
Muriendo por una cerveza fría y un olvido…
Buenas noches ciudad ajena,
Bienvenida soledad.

Credo

Creo que me gusta lo imposible,
Y los momentos sin momentos,
El cariño cuando lo necesito,
Apenas lo suficiente,
Nada tan aterrador,
Creo que me da vueltas la cabeza, cuando pierdo en el juego,
Cuando te miro y te apareces,
Aunque mejor cuando te apareces y no te miro,
Creo que las lágrimas se fueron,
En lo imposible del sueño,
En el terror de la noche,
En los caminos perdidos,

Hoy hoy soy viento de otro viento...

domingo, 11 de diciembre de 2011

Alguna vez pensé en el suicidio como manera de celebración...
i mean, chaqueta de cuero, vaqueros rotos y zapatillas sucias,
un polo de los Beatles, borracho hasta el tuétano,
y decir... porqué no!

porqué carajos no,
porqué jodidamente no,
qué de malo tiene ser un infeliz,
y vivir sin vivir, querer morir,
descender, ascender,

todo es un problema matemático...
al final el resultado no importa,
nadie lo sabrá...

(sentado, en el piso de madera, observando mis discos, apretando el gatillo)

Los osos...

Eran dos osos,
ella le sirve el café,
él embarduna de mantequilla el panetón,
ella dos cucharaditas de azucar,
él la ama, pero no entran en razón,

Qué te_amo_ pasa?

nada_amo_pasa...

Item festum, ego ex tristitia magna...

Del mismo modo,
continúa,
la fiesta de la tristeza,
la tarde sin sol, el comienzo de una era,
se me acabaron los cigarrillos...

del mismo modo, al mismo tiempo,
ella danza con las sombras,
y mueve sus manos dejando ver lo largo de su cuerpo,

y sin poder evitarlo,
sin si quiera poder expresarlo,
ella no me pertenece,
le pertenece a su propia libertad,

las ideas se escaparon de una caja chiquitita de color rojo,
y ahora la cerveza no es más que un tónico de ilusiones,
el nacimiento de un monstruo, mi dedo anular se ha roto,
gangrenado el corazón,

ella sigue bailando,
y yo sigo en esa misma esquina,
esperando que el semáforo no salga del rojo,
y así poderla ver una vez más.