En mundos de naturaleza, donde los árboles son talados por la envidia, me pregunto… ¿a quién carajo le importan los árboles, la envidia... A quién…?
En tiempos de terror urbano, con sentidos de misterio, cuando el viento es viento… ¿Qué mierda es el viento finalmente? ¿A donde nos lleva?
En etapas no concebidas a la imaginación, cuando diatribas son conversación, digo y manifiesto que lo maldito es maldito y que la bendición no existe, así existan los árboles, el viento, las naranjas, las naturaleza, en general, Dios… lo bueno, el hip hop y derivados, así exista una voz lo suficientemente poderosa como para llorar…
El pasto, me ayuda a caminar, en ese terreno agreste, dicen, dices, no confundamos comas por exquisiteces, no jodan pues… no solo hay locura y estado puro en mi alma…
Aunque ahora si podría apostar que dirías lo que dijiste, y que tu segunda alma me dijo que, que si ya me di cuenta a la mierda lo demás, como diría la leucemia mi hermano, a la mierda lo demás… todo…
No hay comentarios:
Publicar un comentario